Eslovenia - Representaciones y creencias

En Eslovenia, como país democrático, está asegurado el derecho de libertad de religión. Según el último censo realizado la mayoría de los eslovenos dicen ser católicos.

 Los datos concretos son los siguientes: 

• 57,8 % católicos 
• 2,4 % musulmanes 
• 2,3 % ortodoxos 
• 0,9 % protestantes 
• 3,5 % creyentes que no pertenecen a ninguna religión 
• 10,1 % ateos 

La fe católica tuvo a través de la historia un importante significado para el desarrollo del pueblo esloveno y aun hoy en día tiene influencia en la sociedad y la vida pública
En Eslovenia existen muchos católicos no practicantes y, al mismo tiempo, hay familias que no son católicas pero conservan las tradiciones y costumbres de las fiestas cristianas. La Pascua y la Navidad son más que fiestas cristianas, son también las fiestas familiares más importantes. 

En tanto el 2.4% de los musulmanes que reciden aquí, son principalmente inmigrantes de Bosnia y Herzegovina.
La mayoría de iglesias en Eslovenia son católicas, entre las que se encuentra la más importante: la basílica de María Auxiliadora en Brezje. 

Puntos emblemáticos

Sin duda que los puntos más emblemáticos de Eslovenia son las decenas de castillos que hay. Muchos han sido restaurados o convertidos en museos y hoteles. Normalmente están situados en las cimas de cerros, y no sólo reflejan un bello paisaje, sino que tienen una impronta histórica muy importante. Tanto es así que entre los diez destinos turísticos más visitados en Eslovenia, cuatro son castillos. El Castillo de Bled entusiasma con sus maravillosas vistas al lago de Bled y las montañas aledañas, el Castillo de Liubliana con su torre panorámica reina sobre la ciudad capital. Una de las particularidades entre los castillos europeos es el Castillo de Predjama, esculpido en la roca y comunicado por túneles subterráneos, entre muchos otros.

Durante gran parte de la historia la zona de Eslovenia fue poblada por diferentes culturas que han dejado a su paso numerosas huellas. Los copiosos yacimientos arqueológicos comprenden todas las épocas más importantes de la historia: desde objetos de la Edad de Piedra, la Edad de Hierro y de Cobre hasta descubrimientos del período greco-romano, la época eslava antigua y la Edad Media. Muchos de estos descubrimientos son importantes a nivel internacional, como ser el caramillo más antiguo del mundo, descubierto en Divje Babe cerca de Idrija que tiene más de 55 mil años.

También posee muchos monumentos en homenaje a las víctimas caídas en las guerras: de la Primera Guerra Mundial especialmente en la región de Posočje y de la Segunda Guerra en toda Eslovenia.

Sentimientos nacionales

Si nos referimos al sentimiento nacionalista esloveno, debemos conocer un poco de su historia: En 1809, gran parte de Eslovenia quedó dentro de las Provincias Ilirias del primer Imperio Francés de Napoleón I. A partir de 1814, se restableció el dominio de los Habsburgo. El ilirismo –que comenzó ante todo como una expresión de solidaridad con los croatas y otros eslavos del sur- se convertiría en la primera base del nacionalismo esloveno, que se mantendría activo durante todo el siglo XIX, pero que permaneció no obstante marcado por su origen occidental y católico, rechazando a los serbios ortodoxos que se emanciparán de los turcos.

Con las revoluciones de 1848, los eslovenos reclamaron la creación de una provincia eslovena dentro del Imperio austríaco y a partir de 1870 se presenta la primera expectativa de unión de los Eslavos del sur (Eslovenos, Serbios y Croatas).

Y en este punto, se conecta con los conflictos históricos,  ya que todos los países de la región se vieron fuertemente afectados con estas revoluciones. Ya en 1918 y con el colapso de la monarquía Austro-Húngara, los eslovenos se unieron al Reino de los serbios, croatas y eslovenos, el cual cambió su nombre en 1929 por el de Reino de Yugoslavia. Luego del restablecimiento de Yugoslavia al final de la Segunda Guerra Mundial, Eslovenia se convirtió en parte de la República Federal Socialista de Yugoslavia, declarada oficialmente el 29 de noviembre de 1945. La actual Eslovenia fue formada el 25 de junio de 1991 debido a su independencia de Yugoslavia. Para hacer efectiva su independencia, Eslovenia se enfrentó a las fuerzas armadas federales de Yugoslavia en un breve conflicto armado denominado Guerra de los diez días, también conocida habitualmente como Guerra de Eslovenia. Otro dato para destacar es que Eslovenia se unió a la OTAN el 29 de marzo de 2004 y a la Unión Europea el 1 de mayo de 2004.

Desde entonces, no se registraron puntos de conflicto mayores, ya que Eslovenia ejerce una democracia ininterrumpida desde entonces.